¿Crees que alguien está enfermo por usar silla de ruedas?
Hay una gran confusión para muchas personas acerca de una lesión medular, ya que es un tema complejo. Con el tiempo, me he dado cuenta de que muchas personas cuando ven a alguien en silla de ruedas inmediatamente asumen que está enfermo o enferma. Entiendo que pueda ser confuso ya que hay enfermedades que lamentablemente sí pueden hacer que una persona termine siendo usuario de silla de ruedas, pero, asumir que alguien está enfermo, o tratarlo como enfermo, demostrar lastima o quitarle valor como persona porque usa una silla de ruedas, no es cordial, y puede ser ofensivo.
Como esposa de mi pareja que tiene una lesión medular, me he frustrado e incomodado cuando me preguntan o asumen que mi esposo está enfermo. Con esto no quiero que se malinterprete mi molestia, si no que en lo particular siento que le quitan valor como persona a mi esposo. Ya que vivo con el día a día siendo su cuidadora, se todas las cosas grandiosas que puede hacer aun con sus limitaciones. Considero que una buena educación a la comunidad de lo que es una lesión medular y las discapacidades en general, podría evitar que muchas personas dejen de ver a las personas con discapacidad física como personas enfermas.
Otra de las cosas que me molesta mucho es cuando se refiere a una persona con discapacidad física u otro tipo de discapacidad que les impide caminar les nombren: “inválidos”.
Este término no solo lo usan muchas personas, también me ha tocado ver que algunas instituciones lo han usado. En una publicación de varios meses ya, vi que usaron ese término, era una institución conocida. Me di a la tarea de contactarles y dejarles saber que es un término erróneo y les sugerí que deberían corregir la publicación. Afortunadamente recibí una contestación y me dijeron que dejarían saber a la institución para corregirlo. También, hace varios años, una persona se acercó a mi esposo y a mi mientras salíamos del supermercado, esta persona le dijo a mi esposo: “siento mucho que haya quedado invalido”. En ese momento, yo paré la conversación y respetuosamente le dije: “Ese término no es correcto”. Le di mi punto de vista sobre ello y entendió.