Desde el comienzo de la pandemia de la COVID-19 en los Estados Unidos, el Congreso tomó medidas para responder en una serie de llamadas "fases"- las piezas individuales de la legislación que han crecido en tamaño y alcance, junto con la seriedad que rodea este virus.
La primera respuesta del Congreso, denominada "fase uno", fue un proyecto de ley de gastos de emergencia incluyendo $8.3 millones de dólares en fondos para responder a la pandemia en varias formas. La legislación, oficialmente denominada la Ley de Apropiaciones Suplementarias para la Preparación y Respuesta al Coronavirus, (resumen en inglés, aquí) fue aprobado por la cámara y el Senado y promulgada el 6 de marzo. Esta ley aumenta los fondos para la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), los Institutos Nacionales para la Salud (NIH) y otras agencias de todo el gobierno, específicamente para hacer frente a la creciente amenaza del coronavirus. La ley (y las consiguientes acciones de la administración) también incluyen medidas para aumentar el acceso a los servicios de telesalud, que serán fundamental en la atención médica en tiempos de "distanciamiento social" necesarios.
La "fase dos" es una pieza mucho más grande de la legislación principalmente escrita y diseñada por la Presidenta de Cámara Nancy Pelosi. Tiene un énfasis especial en asegurar la licencia por enfermedad pagada durante la pandemia; garantizar las pruebas gratuitas para el virus; expandir la asistencia alimentaria y los beneficios de desempleo; y exigir que los empleadores proporcionen protecciones adicionales para los trabajadores de salud. Esa legislación, la Ley de Respuesta al Coronavirus de las Familias Primero, (resumen en inglés, aquí) fue firmada en ley por el Presidente el 18 de marzo. La mayor parte del costo de la legislación se debe a nuevas provisiones para la licencia pagada y los seguros de desempleo. Se espera que entrará en vigor dentro de pocos días.
El 27 de marzo, la Cámara de Representantes aprobó por unanimidad la Ley de ayuda, alivio y seguridad económica contra el coronavirus (CARES, por sus siglas en inglés), la tercera pieza de la legislación aprobada por el Congreso para hacer frente al brote del coronavirus (COVID-19). Luego fue firmada en ley por el presidente.
La legislación incluye expansiones esenciales para los programas federales y medidas importantes destinadas para proporcional un estímulo económico y medidas de recuperación para disminuir las consecuencias económicas de la pandemia. Representa la mayor inversión de este tipo en la historia del país. Entre las principales disposiciones de la legislación están las expansiones de seguro de desempleo, los pagos directos en efectivo a casi todos los estadounidenses, las ayudas a las empresas (grandes y pequeñas), hospitales, doctores, escuelas y gobiernos estatales y locales.
Mientras continuamos examinando los detalles, le actualizaremos sobre la legislación, así mismo como la información clave sobre cómo puede conseguir estos beneficios que se implementarán en los próximos días y semanas.