¿Qué desea una esposa cuidadora como yo en las fiestas decembrinas? Para dar contexto, yo soy cuidadora 24 horas al día 7 días a la semana de mi esposo que tiene una lesión medular. Se podrían imaginar que mi primer deseo sería que mi esposo volviera a caminar y mover su brazo izquierdo, y por supuesto que sería mis deseos principales, pero, para acercarme más a la realidad, compartiré los deseos a partir de la lesión de mi esposo.
Imaginemos que me dan la oportunidad de pedir tres deseos, mi primer deseo sería; que el dolor neuropático de mi esposo desapareciera y al abrir mi primer obsequio debajo de un arbolito navideño de regalito dentro estuviera a solución a eliminar el dolor, pero que no solo fuera para mi esposo si no para todos los que los sufren, ya que muchos de los lesionados medulares sufren de este mal que les quita tanto. El dolor no solo afecta a los lesionados, también nos afecta a los que los queremos y los vemos sufrir. El que mi esposo no tenga dolor sería de los mejores regalos del mundo para mí.
Mi segundo deseo sería; que pudiera recuperar el control de su vejiga e intestinos. La libertad que eso le daría sería increíble para él y para mí. El no tener control provoca muchos malestares tanto infecciones urinarias y accidentes intestinales. Si el recuperara el control nos cambiaría la vida, ya no habría preocupaciones de sonda, de programa intestinal y todo el trabajo que para ambos conlleva. Desde el punto de vista de una cuidadora como yo y los que lo viven me darían la razón, no tener esas tareas nos daría paz y tranquilidad.